Son de color café claro con dos líneas oscuras detrás de la cabeza (pronoto) y miden entre 1,2 y 2 cm de largo. Tienen hábitos nocturnos y en las casas o departamentos se encuentran normalmente en las cocinas o baños, pero principalmente en locales gastronómicos, lo más cerca posible de los alimentos y en lugares húmedos y cálidos. Pasan la mayor parte del tiempo escondidas en grietas y hendiduras, y el 90% de ellas se mueve en un radio no mayor a 4 mts., pero es común que se trasladen de un lugar a otro en bolsas, envases, cajas, etc. La hembra produce una ooteca de entre 30 y 48 huevos cada 1 a 2 meses dependiendo de las condiciones ambientales y la transporta en su abdomen durante todo el período de incubación (aprox. 28 días). Las recién nacidas pasan por 6 o 7 estadíos ninfales antes de llegar a adulto y éste en general no alcanza a llegar al año
de vida.
Son de color café rojizo y un poco más claro casi amarillo en la parte de atrás del pronoto. Miden entre 4 y 6 cm de largo y son capaces de planear grandes distancias. Es común encontrarlas alrededor de las edificaciones en zonas cálidas, húmedas y sombreadas, en drenajes, en los árboles, en acequias, y se alimentan de todo lo que encuentran a su paso. Forman una ooteca por semana con 14 a 16 huevos cada una y pudiendo producir a lo largo de su vida hasta 90 de ellas. Las ninfas se liberan a los 50 a 55 días aproximadamente y pueden tener de 9 a 13 mudas antes de llegar a la madurez.
También conocida como cucaracha negra, mide 2,5 cm de largo. La hembra es de color negro brillante y tiene alas rudimentarias y poco funcionales, en cambio el macho posee un par de alas color café, pero ninguno de los dos sexos puede volar. Habitualmente en interiores se las puede ver en los sótanos, cloacas o drenajes y en exteriores en el césped debajo de hojas, en leñeras, alcantarillas, patios sombreados, siempre en lugares que disponen de condiciones de humedad elevada y donde cuenten con materia orgánica en descomposición para alimentarse. Pueden producir hasta 8 ootecas de 16 huevos cada una y eclosionan, dependiendo de las condiciones ambientales, aproximadamente a los 60 días. Las ninfas pueden pasar por 7 a 10 estadíos hasta completar su metamorfosis.
