Las especies más comunes son de color negruzco y brilloso, de gran tamaño, entre 0.6 y 1.9 cm de largo, y las obreras poseen grandes mandíbulas. Normalmente anidan formando galerías en árboles o maderas en estados de descomposición, aunque a veces también atacan maderas sanas, en techos de madera, debajo de los aislantes, en cualquier cavidad de la edificación, en las leñeras, y se puede encontrar habitualmente estos nidos porque los mantienen limpios y lisos entonces expulsan al exterior restos de aserrín, fragmentos de material o hasta hormigas muertas. Se alimentan principalmente del néctar producido por pulgones o cochinillas, de los mismos alimentos de los seres humanos o a veces de otros insectos. En primavera las hormigas aladas fértiles vuelan fuera del nido para ser fecundadas y formar nuevas colonias. Estas colonias se mantienen generalmente en 2000 a 3000 individuos.
Existen muchas hormigas cortadoras pero esta es una de las más comunes. Son de color café oscuro, miden aproximadamente 1 cm de largo y se caracterizan por cortar el follaje de la vegetación y cargarlo hasta su nido. Estos fragmentos le sirven para cultivar un jardín subterráneo de hongos del cual se alimentan. Pueden dejar a un árbol sin hojas en una sola noche y trasladar los restos por 180 a 200 mts. Nunca anidan en los interiores, lo hacen en tierras drenadas o arcillosas formando montículos que pueden alcanzar los 30 mts. de diámetro y si se le agregan los montículos más pequeños que forman alrededor del principal puede llegar a los 80 mts de ancho, ocupando una superficie que puede ir de 30 a 600 mts. cuadrados y albergando hasta 8 millones de hormigas. Las hembras y machos con alas se aparean a través del vuelo nupcial, y luego de hacerlo con varios machos la hembra pierde sus alas y busca una guarida para formar una nueva colonia, pero sólo el 2.5% lo logra.
Su color varía de color café claro a oscuro casi negro pero brilloso y es muy pequeña, varía de de 2.2 a 2.6 mm de largo. Se alimentan principalmente de azúcares de las frutas, secreciones de las plantas o producidos por los pulgones o cochinillas. Anidan habitualmente en tierra húmeda o cerca o debajo de las edificaciones, tablas o en la base de los árboles, y se caracterizan por ser muy agresivas con otras especies al punto de eliminarlas o desplazarlas de la zona. En cada nido pueden existir varias reinas que se aparean, por lo general bajo tierra, formando supercolonias.
Las más comunes son de color café rojizo, las obreras miden entre 1.6 y 6 mm y se caracterizan por ser muy agresivas con otros animales o personas a través de sus picaduras. Se alimentan de otros insectos muertos o de secreciones dulces de las plantas u otros materiales. Se las puede identificar porque anidan principalmente en los jardines formando montículos de tierra e distintos lugares y que pueden estar conectados por túneles subterráneos, aunque también se las puede ver en interiores en zonas cercanas a fuentes de calor. Cada colonia puede tener una o varias reinas.